Llevo logado en Ratebeer.com desde hace siete años. Quién lo iba a decir aquel enero de 2007 que iba a llegar a semejantes cifras de cervezas diferentes probadas. Por aquel entonces el fenómeno microcervecero en España estaba echando sus primeros pasos seguros, un tanto dubitativos al principio pero poco a poco cojiendo más soltura. Como los primeros pasos de un bebé.
Aquellos años era harto complicado probar otras cervezas que no fueran belgas, alemanas, checas, alguna norteamericana y poco más. Si me dicen que siete años después, viendo el panorama que había entonces, iba a llegar a las 2000 valoraciones me hubiera hartado de reir (este "hito" lo conseguí el mes pasado, esta entrada va con retraso, ahora mismo creo que van unas 2050). Encontrar esa cantidad de cervezas diferentes entre las estanterias de los centros comerciales se me hacía imposible es poco.
Por aquel año yo estaba trabajando en Sevilla y aparte de los centros comerciales donde probaba y compraba cerveza diferente cada vez también iba a una cervecería llamada Cervecería Internacional en donde iba casi todos los jueves a tomarme dos o tres cervezas. En este sitio se podía elegir de entre una carta de unas doscientas cervezas, principalmente belgas y alemanas pero también alguna de ciertos países exóticos como Japón, Jamaica, y algunas sudamericanos. Por aquel entonces tenián creo recordar ocho grifos, varios de ellos fijos. Uno de los fijos era el que tenía la Spaten Hell y esta cerveza era con la que siempre abría la sesión, acompañada de una tapa de bacalao en aceite riquísimo.
A pesar que estaba logado en Ratebeer se daba la paradoja que no hacía apenas valoraciones en la web. Ahora mismo me preguntó el por qué sin encontrar justificación alguna. Lo que sí, viendo mis estadísticas en dicho website está claro que la primera que valoré fue la Rochefort Trappistes 8. Genial comienzo. Volviendo a más atrás he de matizar que las catas en vez de apuntarlas en la web me las apuntaba en alguna servilleta, posavasos, recibo de cajero o lo que pillara más a mano. Así ha pasado que después de dos mudanzas, una de Sevilla a Madrid y otra de Madrid a Madrid creo y estoy seguro de ello que hay muchas que se han perdido por el camino. Una vez localicé un buen número de ellas y aún sigo encontrando alguna entre las hojas de un libro, unos apuntos, etc. También paradójicamente no encuentro la cata que hice de esa Spaten Hell... caprichos del destino...
Durante mi estancia en Sevilla, mi último año, venía a Madrid todos los fines de semana. Mi, por aquel entonces, novia Eva ya estaba trabajando en nuestra ciudad de origen. Después de unos años en los que había pedido traslado en el trabajo y se había ido a vivir a Sevilla en donde estuvimos viviendo en pecado; de nuevo lo pidió para venirse a Madrid teniendo toda la certeza que yo iba a volver a los pocos meses. No fue así y yo tuve qe esperar un año más. Como digo, que me disperso, venía a Madrid todas los fines de semana y solíamos frecuentar con cierta asiduidad una cervecería en el barrio de Aluche llamada El Gato con Botas, aunque previamente íbamos a cenar a otra cervecería en la acera de enfrente la franquicia de Estrella Galicia "Cerveza de Bodega". O a tomar una previa el La Abadía de Madrid, en la misma acera. En El Gato con Botas se podía degustar una buena variedad de cervezas belgas principalmente. Desafortunadamente ni una ni otra existen ya.
Después de eso ya vino el translado a Madrid y con ello el boom de las tiendas cerveceras y a la vez mayor asiduidad a locales cerveceros de la capital: L'Europe y Nicolás, Oldenburg y José Luís, Kloster y Manolo eran los clásicos, y además los tres situados en la misma acera.
Muy rápido aparecieron las tiendas cerveceras: Cervezorama, Labirratorium , La tienda de la cerveza, El Cervecero (en Las Rozas), La Buena Pinta, The Beer Garden, La Maison Belge. No quiero ni me gustaría quedarme alguna olvidada. Bueno sí, una vinoteca que no recuerdo el nombre situada paralela a Fuencarral en donde podía comprar cerveza variada. por supuesto las tiendas on-line: Zombier, Cervezalandia, Cervecyl, 2d2despuma... y alguna más a la que he comprado y a las que no he comprado pero queda pendiente una visita próxima, llámese Biirkonnen que para eso me pill al lado de mi lugar de vacaciones.
Y por supuesto los locales aparte de los ya existentes: Animal, La Tape, Irreale, Fábrica Maravillas, El Estribo, El Pedal, CafeeKe, etc
Pero antes de todo esto que ya os lo sabéis de memoria, volvamos, ahora sí, a finales del siglo pasado. Allá por el 1998. Casi nada... Lo he leído por la blogosfera, aparte de comentarlo varias veces, que varios empezaron por las Grimbergen, Leffe, Chimay (aunque seamos siendo asíduos a ellas), Franziskaner, etc. Pero si hay otra cerveza por la que enamoré por los encantos de este líquido es la Gulden Draak. La primera que probé fue en una taberna irlandesa situada en al madrileño Barrio de las Letras. La Taberna del León, con su fachada impresionante con azulejos de las efigies de los escritores que vivieron en el mismo barrio. Su camarero muy serio, el lugar muy tranquilo en el que es menester hablar casi en voz baja, con un ambiente muy apaciguador y una carta de cervezas de unas 40-50 cervezas, principalmente belgas.
Por aquel año yo estaba trabajando en Sevilla y aparte de los centros comerciales donde probaba y compraba cerveza diferente cada vez también iba a una cervecería llamada Cervecería Internacional en donde iba casi todos los jueves a tomarme dos o tres cervezas. En este sitio se podía elegir de entre una carta de unas doscientas cervezas, principalmente belgas y alemanas pero también alguna de ciertos países exóticos como Japón, Jamaica, y algunas sudamericanos. Por aquel entonces tenián creo recordar ocho grifos, varios de ellos fijos. Uno de los fijos era el que tenía la Spaten Hell y esta cerveza era con la que siempre abría la sesión, acompañada de una tapa de bacalao en aceite riquísimo.
A pesar que estaba logado en Ratebeer se daba la paradoja que no hacía apenas valoraciones en la web. Ahora mismo me preguntó el por qué sin encontrar justificación alguna. Lo que sí, viendo mis estadísticas en dicho website está claro que la primera que valoré fue la Rochefort Trappistes 8. Genial comienzo. Volviendo a más atrás he de matizar que las catas en vez de apuntarlas en la web me las apuntaba en alguna servilleta, posavasos, recibo de cajero o lo que pillara más a mano. Así ha pasado que después de dos mudanzas, una de Sevilla a Madrid y otra de Madrid a Madrid creo y estoy seguro de ello que hay muchas que se han perdido por el camino. Una vez localicé un buen número de ellas y aún sigo encontrando alguna entre las hojas de un libro, unos apuntos, etc. También paradójicamente no encuentro la cata que hice de esa Spaten Hell... caprichos del destino...
Durante mi estancia en Sevilla, mi último año, venía a Madrid todos los fines de semana. Mi, por aquel entonces, novia Eva ya estaba trabajando en nuestra ciudad de origen. Después de unos años en los que había pedido traslado en el trabajo y se había ido a vivir a Sevilla en donde estuvimos viviendo en pecado; de nuevo lo pidió para venirse a Madrid teniendo toda la certeza que yo iba a volver a los pocos meses. No fue así y yo tuve qe esperar un año más. Como digo, que me disperso, venía a Madrid todas los fines de semana y solíamos frecuentar con cierta asiduidad una cervecería en el barrio de Aluche llamada El Gato con Botas, aunque previamente íbamos a cenar a otra cervecería en la acera de enfrente la franquicia de Estrella Galicia "Cerveza de Bodega". O a tomar una previa el La Abadía de Madrid, en la misma acera. En El Gato con Botas se podía degustar una buena variedad de cervezas belgas principalmente. Desafortunadamente ni una ni otra existen ya.
Después de eso ya vino el translado a Madrid y con ello el boom de las tiendas cerveceras y a la vez mayor asiduidad a locales cerveceros de la capital: L'Europe y Nicolás, Oldenburg y José Luís, Kloster y Manolo eran los clásicos, y además los tres situados en la misma acera.
Muy rápido aparecieron las tiendas cerveceras: Cervezorama, Labirratorium , La tienda de la cerveza, El Cervecero (en Las Rozas), La Buena Pinta, The Beer Garden, La Maison Belge. No quiero ni me gustaría quedarme alguna olvidada. Bueno sí, una vinoteca que no recuerdo el nombre situada paralela a Fuencarral en donde podía comprar cerveza variada. por supuesto las tiendas on-line: Zombier, Cervezalandia, Cervecyl, 2d2despuma... y alguna más a la que he comprado y a las que no he comprado pero queda pendiente una visita próxima, llámese Biirkonnen que para eso me pill al lado de mi lugar de vacaciones.
Y por supuesto los locales aparte de los ya existentes: Animal, La Tape, Irreale, Fábrica Maravillas, El Estribo, El Pedal, CafeeKe, etc
Pero antes de todo esto que ya os lo sabéis de memoria, volvamos, ahora sí, a finales del siglo pasado. Allá por el 1998. Casi nada... Lo he leído por la blogosfera, aparte de comentarlo varias veces, que varios empezaron por las Grimbergen, Leffe, Chimay (aunque seamos siendo asíduos a ellas), Franziskaner, etc. Pero si hay otra cerveza por la que enamoré por los encantos de este líquido es la Gulden Draak. La primera que probé fue en una taberna irlandesa situada en al madrileño Barrio de las Letras. La Taberna del León, con su fachada impresionante con azulejos de las efigies de los escritores que vivieron en el mismo barrio. Su camarero muy serio, el lugar muy tranquilo en el que es menester hablar casi en voz baja, con un ambiente muy apaciguador y una carta de cervezas de unas 40-50 cervezas, principalmente belgas.
Como digo la Gulden Draak me embaucó desde el principio. Aún recuerdo la primera vez que la pedí lo cuánto que me gustó su botella blanca tipo steinburg, de las típicas botellas belgas que luego me han sido tan familiares. En cuanto probé aquella cerveza me gustó aún más, sus notas a caramelo, especiado y ciertos toques frutales con un punto alcohólico al final. Bien es cierto que después de ella vinieron muchas más dentro de su mismo estilo pero esa me marcó sobremanera.
Dicho todos estos prolegómenos dignos del abuelo cebolleta tenía que conmemorar la valoración 2000 en Ratebeer y para ello estaba todo listo. Una Gulden Draak en la nevera, en este caso la Gulden Draak 9000 Quadruple para rememorar aquellos tiempos de hace la friolera de 15 años. ¡¡Hasta aún tenía pelo!!. Creo que acerté en la elección de esta cerveza. Tenía muchas otras dignas de ser elegida. IStout ediciones limitadas aún rondan en mi habitación, otras que llevan su periodo de guarda y que incluso acumularían una fina capa de polvo si estuvieran en un sitio propenso a ello. Pero tuve que elegir esta.
El nombre le viene del dragón dorado que hay en la parte superior del campanario de Gante (ciudad que recomiendo de obligada visita) y el 9000 es por el código postal de la misma ciudad. Lo de Quadruple ya es por razones obvias. La cerveza es de un color ambarino/cobrizo con una espuma de color ligeramente tostado con una buena y generosa formación de espuma, bastante duradera y con buen encaje. En el aroma se nos presentan las notas típicas de la levadura belga, muy especiada con notas a caramelo, toffe y maltas tostadas. En boca es dulce aunque no empalagosa al principio con intensas notas a caramelo y ciertos frutos rojos en muy buena proporción; notas a madera también están presentes con una sensación en boca a miga de pan tostado. El final es ligeramente amargo y una leve sensación alcohólica muy bien equilibrada por el azúcar tostado.
Como ya he dicho más arriba fue una muy elección, pero lo que también es cierto que entre esta y la Gulden Draak normal creo que me quedaría con la última. Por tener el encanto de cuando era 15 años más joven y por que fue una de las que me introdujo en esta maravilloso mundo de la cerveza.
Dicho todos estos prolegómenos dignos del abuelo cebolleta tenía que conmemorar la valoración 2000 en Ratebeer y para ello estaba todo listo. Una Gulden Draak en la nevera, en este caso la Gulden Draak 9000 Quadruple para rememorar aquellos tiempos de hace la friolera de 15 años. ¡¡Hasta aún tenía pelo!!. Creo que acerté en la elección de esta cerveza. Tenía muchas otras dignas de ser elegida. IStout ediciones limitadas aún rondan en mi habitación, otras que llevan su periodo de guarda y que incluso acumularían una fina capa de polvo si estuvieran en un sitio propenso a ello. Pero tuve que elegir esta.
El nombre le viene del dragón dorado que hay en la parte superior del campanario de Gante (ciudad que recomiendo de obligada visita) y el 9000 es por el código postal de la misma ciudad. Lo de Quadruple ya es por razones obvias. La cerveza es de un color ambarino/cobrizo con una espuma de color ligeramente tostado con una buena y generosa formación de espuma, bastante duradera y con buen encaje. En el aroma se nos presentan las notas típicas de la levadura belga, muy especiada con notas a caramelo, toffe y maltas tostadas. En boca es dulce aunque no empalagosa al principio con intensas notas a caramelo y ciertos frutos rojos en muy buena proporción; notas a madera también están presentes con una sensación en boca a miga de pan tostado. El final es ligeramente amargo y una leve sensación alcohólica muy bien equilibrada por el azúcar tostado.
Como ya he dicho más arriba fue una muy elección, pero lo que también es cierto que entre esta y la Gulden Draak normal creo que me quedaría con la última. Por tener el encanto de cuando era 15 años más joven y por que fue una de las que me introdujo en esta maravilloso mundo de la cerveza.
Qué gran post, de veras, qué delicia! Lo he disfrutado enormemente, tomándome una cervecita de las que te gustan, un petrolaco, jejeje! Muy bueno en lo personal, rememorando grandes momentos y geniales cervezas... Menuda forma de empezar... Rochefort... jejejeje! Si te enseñara donde tengo escritas catas... libretas de toda clase, hojas grapadas... pero no he llegado nunca a una servilleta, jajaja! Lo máximo, y de hecho una de esas veces fue contigo en Torrevieja, en una comunicación en papel de una transferencia que recibí por correo del banco, no se si te fijaste... jajaja! Luego en lo vital, grande Eva y me gustaría haberte conocido con pelo!! Jejeje! Me ha entrado hasta morriña de los locales de Madrid y eso que solo he estado una vez ahí... :P. Y de nuevo en lo cervecil, con una de las cervezas que también me encandilaron desde el principio, la Gulden! Aún recuerdo las veces que Rosana me decía que le parecía demasiado dulce y yo repetía una y otra vez enamorao "perdío" pensando "tu te lo pierdes, chiquilla" jejeje! Gran elección, gran aniversario, enorme el post! Un fuerte abrazo, Jose! Por entradas como esta merece la pena haber esperado tanto tiempo sin leerte!
ResponderEliminarCReo recordar que sí que me fijé en el papel en donde apuntabas tus notas el día que nos vimos el verano pasado, pero creo que no le di la mayor importancia. Será porque yo hacía un tiempo también era así... Desde hace poco habrás visto que uso una libreta que hace poco la gasté y he optado por una de tamaño más grande. Es menos versátil que la anterior pero el fin es el mismo. Un abrazo y me alegro que te haya gustado la entrada.
Eliminar2000 RATINGS, UN PEQUEÑO PASO PARA EL TEDDY PERO UN GRAN PASO PARA LA CERVEZIDAD XDDDDDD
ResponderEliminarME ALEGRO MUCHO JOSETE, QUE SEAN SOLO EL PRINCIPIO DE MUCHOS DÍGITOS, DENTRO DE MUCHOS AÑOS, CUANDO SEAS UNO DE LOS GRANDES RATERS Y TE HAGAS FAMOSO YO PODRÉ DECIR " CON ESE HE SALIDO YO" JAJAJAJA.
LAS BELGAS SIEMPRE SERÁN CLÁSICAS, POR MUCHO QUE NOS VAYAMOS A TIERRAS YANQUIS, NÓRDICAS O BIRMANAS.
Y DESDE AQUÍ ABRO LA PLATAFORMA LLAMADA "YO QUIERO VER UNA FOTO DE TEDDY CON PELO" XDDDDD
SALUDOS CAMPEÓN Y UN BESO PARA EVA QUE ME PARECIÓ MAJÍSIMA EN EL MERCADO. ;D
Bueno eso de ser una de los grandes Raters..., es complicado porque ni tengo la oportunidad de viajar o dedicarme enteramente a ello como hay alguno en la web y porque mi poder adquisitivo no me lo permite que si no...
EliminarLo de verme con pelo..., ya se verá. Quizás en algún festival me pilles despendolado o desmelenado y te enseñaría una foto... jejeje
Ah! por cierto te tomo lo de Eva. Un saludo
EliminarUn privilegio tener en esta comunidad cervecera a un ratebeero tan ilustre. Un placer leerte, ha sido muy interesante saber un poco de tus comienzos. Un abrazo!
ResponderEliminarEl privilegio es mutuo al conocer a tan buena gente gracias a nuestra afición común
EliminarUn abrazo