Un año más y muy brevemente voy a poner las cervezas de navidad que he podido probar en este periodo. Creo que fueron los chicos de Observatorio Cervecero que se estaban acabando las referencias en cuanto a cervezas que se pueden encuadrar dentro de este... no-estilo. Poco a poco buscando se puede hacer uno con un buen repertorio de ellas que muchas de ellas no son mis queridas belgas pero qué se le va a hacer.
Sin contar las cervezas navideñas que cayeron en la Feria de Cerveza Artesana de Madrid que ya conté en
esta crónica, la primera que pude probar ha sido la
CCM Hivernale. De color marrón tirando a cobrizo oscuro con una buena y generos formación de espuma de color beige claro y buena retención. Aroma a maltas tostadas, ligeramente caramelo y especias. Sabor muy especiado, se pueden percibir notas a anís y romero y leves notas a fruta escarchada. Final especiado con notas tostadas y ligeramente dulce. No para tirar muchos cohetes.
La segunda cerveza que tuve ocasión de probar me llegó procedente de Alemania. Se trata de la
Weltenburger Kloster Winter-Traum que probablemente lo único que tenga del calificativo 'de navidad' o 'de invierno' sea la etiqueta. Por lo demás se presenta con un color cobrizo con notas a maltas tostadas, levemente caramelo y floral. Suave amargor, no muy molesto con notas a cereal crudo, ligeramente bizcocho de caramelo. Final levemente dulce con notas amargas en el retronasal.
La siguiente después de un par de 'fracasos' tocaba fiarse de las buenas críticas que recibío esta cerveza el año pasado, así es que este año no he dudado en comprarla, la
St Peter's Christmas Ale. Esas buenas críticas estaban en lo cierto, tanto que a entró dentro de las
mejores cervezas durante el mes de diciembre. Además las tan buenas referencias que he probado de esta cervecera la hacían aún más apetecible si cabe. De color cobrizo y espuma blanquecina, aromas a maltas tostadas, caramelo y especiado. Igual que en el sabor en donde se aprecian notas a anís y jengibre unido a leves toques afrutados en almíbar. Muy buena, otra más de St. Peter's.
Como no podían ser dos sin tres, pues otro desencanto, o
'vayausteasaber'.
Mondas y Lirondas Edición Especial de Navidad. De Mondas y Lirondas está claro que sí. De Edición Especial ya estoy un poco cansado de estas dos palabras cuando se unen. De Navidad..., nada de nada porque creo que la cerveza tenía todos los gérmenes habidos y por haber. Al abrirla su aroma era bastante bueno, notas a nueces y tostado. Cuando la serví en la copa algo me dijo que no iba a funcionar la cosa. Sin espuma, bueno puede ser normal. La pruebo..., y otro fracaso. Ácida y con notas a huevos podridos. Como me llevo muy bien con el que me la vendió le dije con total confianza: "mira esta cerveza que me vendiste está mala. Míralo porque no creo que esté muy bien para tu negocio si la gente sabe que vendes cerveza contaminada". Y sí, me dio la razón. Lo que me extraña es que cuando él mismo coincidió con el productor también le comentó mis mismas sensaciones y el productor le dijo que precisamente le había echado unas hierbas para que hicieran ese efecto, o sea, ácidez. Ah! vale que ahora las cervezas de navidad se caracterizan por ser ácidas..., entonces la has clavado macho, pero para mi esta cerveza (de este lote) me parece un bodrio absoluto.
No todo podía ser malo o medianamente malo. Hay que ver, hecho el scroll hacia arriba y sólo me ha convencido un 25%. Hasta ahora:
Bresañ de Navidad (curiosamente donde se produce la Mondas y Lirondas). De color marrón con mínima espuma blanquecina de escasa duración. Aroma a frutos secos, maltas caramelo y azúcar tostado; dulce de principio a fin, con buena base maltosa y especias, caramelo, azúcar moreno y notas a frutos rojos. Muy bien equilibrada entre las notas dulces y la alta graduación que contiene (10%). Sin duda en este cerveza se nota la mano de Christophe y su origen de Flandes.
Y ya puestos vamos a otra apuesta segura a la noruega Lervig. La
Lervig Reserve Winter Ale con espuma blanquecina de poca duración. En nariz se nos presenta con notas a caramelo, melaza y pasas. Caracterñisticas que también se nos presenta en nariz con un leve dulzor nada empalagoso y una buena presencia alcohólica que se encuentra bien escondida bajo las notas a caramelo y levemente miel. Cremosa, densa y de trago largo se me hizo realmente corta en la botella de 33cl. Sin duda alguna otra buena cerveza producto del maestro cervecero nacido en Philadelphia y noruego de adopción Mike Murphy.
Y volviendo a las cervezas que ni fu ni fa nos encontramos a la
Pfungstädter St. Nikolaus que me llegó gracias a uno de los últimos intercambios que tuve a finales del año pasado y que posteriormente la vi en una tienda de cerveza de Madrid. Cosas que a veces pasan... De color marrón con espuma blanquecina de poca duración con notas muy ligeras a maltas tostadas y caramelo, con un leve amargor al final del trago y notas a toffe. Una cerveza que no se si aquel día me pilló atravesado que desaproveché la mitad de su contenido tirándolo por el fregadero. Sin duda seguro que la hay mucho mejores y el alemán que me la envió se podría haber esperado un poco más, grrrr.
Como no, no podía faltar un clásico en esta entrada: Brewdog y su
Brewdog Santa Paws. Aún resonaban en mi cabeza las palabras de Pau referente a los fiascos que ha tenido con estos escoceses que según él a día de hoy y salvo contadas excepciones están viviendo un poco de las rentas. Se pueden ver las opiniones cruzadas en los 'Comentarios' de
esta entrada. Y yo pensaba, esto no me puede pasar a mi, no. Pues toma!! otra cruz!! u otro fiasco. De color marrón muy oscuro y notas herbales y especiadas con leves notas en boca a café y miel pero que se queda un poco 'corta'. No sé qué pensar de esta cerveza, pero queda muy lejos de lo que Brewdog me tenía acostumbrado hasta ahora. Ojo Pau, que con ello no quiero decir que estén viviendo de las rentas; sino que esta, en concreto esta, me ha decepcionado bastante. O quizás es que estaba muy bien acostumbrado.
Otra cerveza gracias un intercambio: el
1st European Secret Santa en el cual se nos instaba, previa inscripción, a hacer un 'amigo invisible' con otros Ratebeerianos de toda Europa e Israel. Por suerte me tocó recibir de Dinamarca, un país del cual cada vez me sorprende más todo lo que está saliendo y lo que nos está llegando. Por el contrario tuve que enviar una caja a Alemania con buenas referencias oscuras de micros españolas. En cuanto a la misma esta es otra que de "cerveza de navidad" tiene, en este caso, el diseño del bote de 50cl que la contenía: la
Fuglsang Julebryg (Stærk Ding Dong). Color dorado con espuma blanca, aroma con notas metálicas, sabor malteado con matices dulces en boca y muy alcohólica, muy descompensada e incluso molesta con un final amargo y alcohólico.
Y por fin... ALELUYA!!!, tras varios desencuentros ya tocaba, ya!!. La
Alvinne Melchior Bourbon Barrel Oak Aged la tenía en casa desde hace más de un año. Ahí estaba mirándome con cara de desconsolada y diciéndome "Bebeme, si no estoy tan mala. Olvídate de los geisers que comentan OTROS por ahí". Dicho y hecho, el día seis de enero era el propenso para esta cerveza. Su color cobrizo con espuma blanquecina de escasa duración. Aroma fuerte a bourbon y madera, notas a caramelo y toffe y algunos frutos rojos. En boca predomina sobre todo el bourbon de principio a fin, frutos maduros con intensas notas a caramelo y pasas, con un leve dulzor y ligero amargor al final muy bien compensado con las notas añejas a barrica. Por fin una cerveza la cual sí que he de decir que me convenció sobre manera.
Pero como no todo el campo es orégano volvemos a las cervezas, no mediocres que me había tomado antes que la Alvinne Melchior Bourbon, pero sí un poco anodinas; sin el
punch que tiene cualquier cerveza de navidad de origen belga. Hasta ahora como digo las cervezas de navidad de Alemania o lo que es lo mismo las
Weihnachtsbier, que no había dicho el término hasta ahora; me habían parecido un poco insulsas, a falta de algo. La Tucher Christkindlesmarkt Bier no iba a ser menos y, ligera con notas a cereal crudo, ligeramente dulde al principio y final levemente amargo. Ni más más; ni más menos. Con esta escueta cata lo digo todo.
Vamos a probar con una americana a ver si va a ser que esta navidad estoy un poco cruzado:
Rogue Santas Private Reserve. Estoy cuuzado, desde luego que estas navidades me tenía que haber asociado a las Hefeweizen que seguro que hubiera sacado mejor provecho. Esta cerveza de colos marrón tiene una alta presencia de especias, ligeramente caramelo y fruta madura en el aroma. En boca se repite bastante a lo percinido en el olfato, aunqubien es cierto que se pueden distinguir matices anisados y a romero, con leves notal dulces, muy leves y fruta en almíbar. Final ligeramente dulce con leve amargor perfectamente escondido por las notas a caramelo que aparecen al final del trago. No obstante y a pesar de todo..., no me terminó de convencer.
Ya puestos vamos a por una marca que a mi todo lo que he probado de ellos me ha gustado: Evil Twin. Su
Evil Twin Christmas Eve at a New York City Hotel Room edición del 2011 no es más bien una cerveza de navidad al uso y a la que estamos acostumbrados. Es una Imperial Stout con nombre que hace mención a la navidad pero no más. Pienso, voy a hacer trampas y a pesar que esta es una Imperial Stout va a colar en esta entrada por el hecho que el nombre recuerda a la navidad... CATACROCCCC!!!. Yo ya no sé qué pensar si ha habido alineación de astros últimamente o alguien ha dado con la cuadratura del círculo. Destapo la botella y dejo caer su enamoradizo líquido de color negro intenso y formando una bonita capa de espuma de color beige oscuro. Aroma a gramos de café y chocolate negro..., algo va mal doctor, se nos va... Sabor ácido, muy ácido incluso a llegar a ser molesto.
Ya uno ante tales horribles experiencias puede tirar la toalla, yo no. No hay que darse por vencido, hay que levantarse una y otra vez, volver cual Ave Fénix, y... tropezar de nuevo no con la misma piedra pero sí con una muy gorda, ni más ni menos que de 50cl.
Thisted Julefnug de Dinamarca. Ni su color marronáceo, ni su bonito encaje, ni sus notas a lúpulos florales unido a leves toques a nueces, ni su sabor ligeramente acaramelado con un sutil amargor final hicieron que me pareciera una cerveza muy del montón. Otra cerveza que recibí gracias al
1st European Secret Santa. "Otra?, pues vaya
'chuscas' que te envían". No hombre, no es para tanto; podéis ver todo lo que recibí clikando en el link de dos líneas arriba. Démosle un voto de confianza a estos
Frikintercambios.
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| Foto de aquí... y va y se me pasa hacer la foto... |
Pero..., oh, Dios mío!!. Al final del tunel puedo ver la luz, y qué luz. Hizo falta que asistiera a la presentación de Humulus Lupulus de su Hard as a Hop para que después de dicho evento, el cual tendrá su entrada correspondiente, fuera a una conocida cervecería justo al lado doblando la esquina. Allí estaban dos conocidos blogueros con los que he compartido más de una (centena) de cervezas para decirme: "Aquí tienen pinchado
Alvinne Melchior: cervezón en toda regla". Hubo unas ligeras dudas a la hora de decantarme por la cerveza, pero al final me dejé llevar.
De color anaranjado con una espuma esponjosa de color blanquecino la cual deja un bonito encaje en la copa. Aroma ligeramente a levadura belga, fuerte presencia de caramelo con ciertos matices a vino blanco dulce y frutos rojos. Sabor dulce al principio, siin llegar a ser empalagoso, muy frutal con notas a frutos rojos maduros y algunas especias predominando el clavo, leves notas a barrica con una alta presencia a caramelo. Final igualmente con una buena presencia a caramelo de muy buena duración. La sensación en boca es densa y muy cremosa como si uno estuviera bebiendo pan líquido. En definitiva un cervezón que culmina mi entrada sobre mis cervezas de navidad o, mejor dicho en este caso, de temporada.
Queda claro ante tanta decepción que Bélgica siempre tendrá un lugar preferente en esto de cervezas de navidad, al menos para mi. Y Alvinne..., mucho más. Esto ha sido todo o digamos casi todo en cuanto a cervezas de navidad se refiere este año. Tengo alguna bala en la recámara ante tanto fiasco pero no sé si la abriré en este año o aguantaré a reservarla durante uno más. La tentación es fuerte, pero más fuerte es aún la "tentación del lado oscuro de la fuerza"
1.
(1) Ahora mismo oyendo de fondo la película Star Wars Episodio II, el Ataque de los Clones.
* Ahora mismo me pongo a pensar en lo que puse en el primer párrafo referente a lo que comentarios de Debora y David del Observatorio Cervecero en que se estaban acabando las referencias que nos llega en cuanto a cervezas de navidad. A lo mejor se referían a que últimamente lo que sale deja mucho que desear...
Cada cerveza tiene su precio, pero no se paga en metálico. Como moneda de cambio han ideado unos posavasos cobayeros los cuales servirán como canje por cada una de las cervezas. Los posavasos para cada una de ellas oscilan entre 1 y 3, siendo el valor de cada posavasos de 1.50€. Estos posavasos que funcionan a modo de fichas de caje se pueden adquirir en la tienda de Cervezorama, por Internet en la página web o en el mercado el día de autos.
