Tal y como pasó el año pasado gracias a Claudio, de Cervezas Far West me he podido pasar por
este Salón del Gourmet en donde se dan cita gran cantidad de productos
gastronómicos de cualquier rincón de España y de algún otro país distribuidos
en los pabellones 2, 4 y 6 de Ifema. Todos los años hay un país invitado, en este fue Japón,
ocupando un área bastante grande en cuanto a superficie. No obstante también se
pudo ver stands de Suiza; alguno de Francia promocionando sus
espumosos; Portugal, que nos mostraba algunos productos típicos tales como
quesos; Italia con un par de máquinas cortadoras de embutido
Berkel que hacían las delicias de todo el que pasaba por al lado,
etc.
Si nos ceñimos a la presencia
cervecera este año ha habido un claro aumento con respecto al año pasado. En el plano de cerveza industrial la única que estaba era
Estrella Galicia que a su vez era patrocinadora oficial del evento con un starnd muy a lo grande, con una barra interior en donde se podían degustar algunas de sus variedades: la Estrella Galicia Especial, la 1906 y la Sin y aparte de dos sidras: la Maeloc Seca y la Dulce. Faltaron dos grandes cerveceras que estuvieron dos años atrás: El Grupo Mahou-San Miguel y la Damm. También el año pasado estuvo sólo la marca gallega. Para el miércoles había organizado una cata de cervezas belgas que distribuye Estrella Galicia en España. Después de pensarlo un poco no lo vi nada atrayente.
Pero antes de dirigirme al stand de Estrella Galicia el primer día me
topé de bruces con un distribuidor de cerveza escandinava en España y
más centrado en la zona de levante, Baleares, Canarias y costa sur
peninsular, lugares como se comprueba a simple vista en los que cervezas finesastales como Olvi, Sandels o la estonia A. Le Coq en sus distintas variedades siempre
tienen gran salida merced al alto porcentaje turístico. Pude hablar un buen rato con Emilio el cual me dio algunos datos de las cervezas que trae así como su interés en buscar contactos para ampliar su distribución un poco más por el resto de España. Él mismo me agasajó con una buena ristra de cervezas de las que distribuye pero no contento con eso me ofreció allí mismo hacer una cata con cada una de las cervezas. Muchas gracias por el buen comienzo.
Justo al lado teníamos la presencia de la
Cerveza Grana la cual sólo elabora un tipo de cerveza, la tostada. Es una cerveza muy bebible de trago largo, ligera de cuerpo y escasa presencia de amargor con notas leves a maltas caramelo y ligero dulzor. Una cerveza que no estaba ni bien ni mal, sino correcta que al menos no es poco para el corto tiempo que llevan en el mercado. Desde aquí les animo a seguir así.
Muy cerca de ambos estaba la avulense
Cerveza Gredos en donde me encontré con
JORGE CERVERIANA. Allí pude probar su nueva cerveza Gredos Whisky de malta a la cual se le notaban ciertas notas, muy leves, a whisky al final del trago. Una cerveza de 6.4% de ABV, fácil de beber y curiosa para el que quiera experimentar a probar nuevas sensaciones con la añadidura del whisky a la cerveza, aunque como digo sea muy levemente. También pude probar su cerveza Gredos rubia, con notas cítricas, heno y ligera de cuerpo.
Acabado el recorrido por el pabellón 2 había que ir al 4 en donde tenía parada obligada con Claudio de Far West. Antes de eso me pasé por el stand de Cervezas Ebora para charlar un rato con Fernando, su master brewer el cual me invitó a tomar tres de sus nuevas creaciones: la Ebora Rubia Mediterráneo, con notas cítricas, ligero malteado y cuerpo y leve amargor; la Ebora IPA, con buena presencia de amargor, notas terrosas y notas a caramelo; y la Ebora Triple Malta, ligeramente dulce, notas a miga de pan, buena presencia alcohólica y buena base maltosa. Todas ellas con una baja carbonatación característica de todas las creaciones de Fernando. Gracias por la botella Ebora Triple Malta.
Al lado de Ebora estaba Jordi de la Cervesera del Montseny con el cual tuve una buena e interesante conversación sobre el panorama microcervecero que se vislumbra en Cataluña y el que hay en Madrid. Jordi también tenía como principal objetivo buscarse una presencia de sus cervezas en la capital, un distribuidor. En el stand Jordi tuvo la deferencia de invitarme a probar algunas variedades que me faltaban por degustar. Entre ellas se encontraban la Lupulus, la EcoLupulus y la Castanya. Me gustó bastante la Lupulus pues se encontraba a medio camino entre una IPA ligera y una Bitter, más fiel a este último estilo. En cuanto a la Castanya también me agradó mucho con sus leves notas dulces al principio y ligero tostado pero que poco a poco a medida que va cojiendo temperatura y sobre todo al final del trago se notas unas notas muy intensas a castaña, tostado y caramelo que hacen las delicias de cualquier paladar.. Gracias por el pack de cervezas que me proporcionásteis.
Después había que encaminar los pasos al stand de la Far West. Ya había vuelto Claudio de unos compromiss que tenía y una vez más me fue grato hablar con él y dar una vuelta de rosca al mercado, presente y futuro al panorama microcervecero. Minutos antes me había dicho Juan Antonio Barrado (JAB) que disponía de una cerveza muy fuerte con ciertas notas a Oporto. Esa fue la palabra mágica así es cuando Claudio me dijo que qué quería probar lo tuve bien claro y pedí una Far West Leyenda. Esta cerveza tiene un color marrón, con casi ausencia de espuma y que lo poco que tiene se disipa muy rápidamente. Notas muy intensas a coñac tanto en nariz como en boca en donde se notaba mucho el alto contenido alcohólico (14% ABV), y al final del trago una vez que tomó temperatura se notaba ciertos toques a azúcar y melaza. La cerveza fue servida muy fría, casi helada, con la intención de que fuera una cerveza de temporada estival. Con ese contenido alcohólico y la alta presencia de notas a vino de Jerez se me hace muy complicado que esta cerveza encaje bien en el público general como para el verano por mucho que se enfríe, independientemente que a los frikis como yo nos guste probar cualquier cosa en cualquier mes. En cuanto a la temperatura de servicio me pareció un desacierto y fue cuando se calentó bastante cuando ganó en matices, si bien la vi un poco descompensada. En cuanto a las notas a vino de Jerez, Claudio me juró y perjuró que no había estado envejecida ni en barrica, ni le había echado chips, ni aditivos ni nada. Todo era cuestión de las levaduras y maltas usadas. Muy sorprendente con las intensas notas a este vino que tenía...
Después de Far West sólo me quedaba un rato para irme a un pequeño stand que tenía las cervezas de Hitachino Nest en el que una japonesa un poco seria al principio que luego fue tomando confianza y el nuevo importador para España me dieron para probar algunas de las cervezas que allí tenían.
La cosa empezó por fijarme en una cerveza de dicha marca que no había probado, la Dai Dai IPA. Después de intentar probarla me dijeron que esa imposible (no la tenían abierta ¿?) y que me podían ofrecer sólo de la White Ale la cual me pareció mucho mejor que cuando la probé hace cosa de poco más de un mes en un local cervecero, mucho más fresca con intensas notas cítricas. Después de una interesante conversación a tres bandas entre el comercial, la japonesa y yo referente a tema licencias para importar cerveza, transporte, proyectos futuros a corto y medio plazo, barriles para el BBF la cosa se animó y en todo un derroche de medios la chica se agachó a la nevera y sacó una Hitachino Nest Ancient Nipponia. Una cerveza con muy buena base a malta, ligeramente dulce, leves toques cítricos y ciertos muy sutiles a jenjibre y miga de pan. Elaborada únicamente con lúpulo de la variedad Sorachi Ace, dato que me fue constantemente recalcado por la chica.
Es todo lo que dio de sí el primer día de estancia. El segundo lo quería enfocar más a probar y conversar con otros productores qcon los que no había hablado el lunes así es que fui directamente al stand de
Dolina, unos productores de Burgos con su innovadora etiqueta-rasca (la primera que veo...) y en donde Victor y Francisco José me hablaron de su cerveza a parte de servirme sus dos variedades disponibles. Una Kölsch muy fácil de beber que según me dijeron llevaron a la Cölner Hofbräu P. Josef Früh por intermediación de un conocido y según los alemanes se ajustaba bastante al estilo Kölsch del que son tan buenos productores. La otra variedad es la de estilo Doble Belga la cual poseía las características notas a caramelo, toffee, malta tostada y quizás le faltaba un poco de notas especiadas pero también muy fácil de beber. Muchísimas gracias por las cervezas que me dísteis y que probaré más detenidamente.
De allí a la que tenían al lado, la
Archi. Juan y su padre me hablaron e insistiron en todo momento que su cerveza sólo llevaba agua, levadura, lúpulo y malta. Esto parece abvio si de una micro hablamos pero nada más lejos de la realidad. Elaboran un estilo que hablando con muchas personas entendidas en la materia es muy complicado de hacer, encima que salga bien y en donde el agua tiene una importancia vital para el éxito o el fracaso. Y así es. Sólo cuando me dijo Juan (padre) todos los esfuerzos para que Juan (hijo) diera su aprobación con el agua lo entendí todo. Elaboran en Humanes, tienen pozo propio en el local pero el agua no es la idónea para una Bohemian Pilsner, la tenían que tratar para conseguir una materia prima con baja dureza. Una vez que lo consiguieron vinieron problemas con los de Sanidad. Tenían que añadir cloro para desinfectarla. Este nuevo añadido iba a dar al traste con el agua que tanto les costó obtener. Para desinfectar el agua y no añadir ningún producto químico pasan el agua por una fuente de luz ultravioleta por lo que se consigue que salga sin gérmenes perjudiciales. Su cerveza es como digo una Bohemian Pilsner de color rubio cristalino y espuma blanca con buena persistencia. Buena base a malta, matices a grano, cereal, heno fresco y leve amrgor. Muy bebible para cualquier época del año y que mejora ostensiblemente cualquier cerveza rubia industrial que pueda haber en el mercado.
Al lado de donde estaba esta zona de los stands de las micros se estaba organizando un concurso de tiraje de cerveza, como no podía ser de otra manera patrocinado por Estrella Galicia. Arte lo que se dice arte si que tenían para echar una caña de cerveza, aunque yo hace unos años cuando 'tiraba' cañas de cerveza en mi pueblo durante las fiestas lo hacía mucho mejor e incluso dejando un buen copete de espuma. En lo que patinaban los concursantes era en responder a unas preguntas que les hacía el jurado después de haber llenado las copas que tenían que llenar. A saber:
P: Graduación alcohólica de Estrella Galicia Especial
R: 3.5 grados
P: Ingredientes de le cerveza Estrella Galicia
R: malta, levaduras,...
P: Matices de la Estrella Galicia 1906
R: A malta y .... (cric cric cric)
P: A qué se debe el color más oscuro de la Estrella Galicia 1906?
R: ehhhhh..., ehhhhh
Y así un montón de ellas. Eran camareros profesionales pero conocimiento del producto que servían: cero pelotero. Si Santa Ildegarda y Guillermo IV de Baviera se hubieran levantado de sus tumbas no hubiera dejado ni al 'tato'.
Poco después me encontré de bruces con una cata de cerveza de Valladolid, creo recordar,
Uila Dones. Tenía otra preferencias sinceramente y es que quería probar alguna de las sidras que habían venido al Salón y que estaban localizadas en el área dedicada a Asturias. Dos buenas sidras naturales (Villacubero y Trabanco) y a comer de lo que daban en los diferentes stands: anchoas, sushi, pulpo, morcilla y diferentes embutidos, etc.
Para finalizar mi segundo día en el Salón me fui a probar la cerveza burgalesa
Mica. Una rubia fácil de beber con notas dulzonas y a miga de pan. También por el stand de las
Bodegas Nivarius para probar su Palax, rubia muy ligera; y la Ceriux que aunque ya había tenido oportunidad de probarla siempre está bien recordar sensaciones, en este caso más bien regulares.
Me dejé en el tintero el stand de Beer & Cheese, Nispra (y eso que tenían dos... pero es que a mi el níspero se me hace un poco difícil), la cerveza de la Axarquía Murex y el de Antara, esos de los que al menos yo vi. También había presencia de la cerveza La Virgen en al menos dos stands como cerveza 'oficial' de los mismos.
Esto ha sido todo lo que dio de si de mi estancia de dos mediodías en el
Salon de Gourmets. Muchas gracias a Claudio por invitarme una vez más.